PERMANEZCAN EN MI AMOR

REFLEXIONES  DE UN GUSANO (Perdón al gusano), QUE ES HIJO DE DIOS

Permanezcan en mi Amor

En el evangelio de Juan 15, 9, Jesús nos dice: “Permanezcan en mi Amor”.

Jesús nos invita a aceptar su amistad, confiando en él. Nos invita a que le creamos en cualquier situación, que no tengamos miedo de abrirle las puertas de nuestro corazón. Que le sigamos, cargando con nuestra cruz, con nuestros fracasos, dolores, pecados y toda circunstancia de nuestra vida. Nos invita a entregar nuestra vida, a gastarla, aceptando la voluntad del Padre, que guía los sucesos de la historia y de nuestra historia, con ternura y amor. Muchas veces esos sucesos son podas para nosotros, pero debemos confiar en que esas podas están hechas para nuestro bien, de alguien que nos quiere y que sabe hacerlas. Todo esto no es algo que solos podamos lograr, por eso nuestro Señor, nos envió a su Espíritu, al Gran Consolador, a aquel que nos guiará a la Verdad.

Nuestra tarea es la de escuchar la Palabra de Jesús, enamorarnos de él con nuestra inteligencia y con nuestro corazón, tratar de ser instrumentos de su Espíritu, siempre apoyados en la oración, que no es otra cosa que relacionarnos con el Dios Uno y Trino. Padre, Hijo y Espíritu Santo. Y confiar…… colgarnos de la voluntad del Padre, de su Providencia, de su Misericordia. Como lo hizo la Madre del Señor, María Santísima, nuestra Madre también, que como sierva se fio de la voluntad de Dios y sólo dijo “Hágase”.

Señor, Jesús.

Toda mi vida la pongo en tus manos.

Que se haga en mí la voluntad del Padre.

Enséñame a aceptarla, amarla.

Envíame a tu Espíritu, para que me guie,

para que me haga renacer,

y pueda ser como tú y tu Santísima Madre,

instrumento del Amor de Dios para todos,

Cordero de Dios,

Víctima de Reconciliación. Amén.